Los “Archienemigos”, al rescate de los cuates…

A mi me importan tres… si los “Archienemigos” del politiquero Tribunal Supremo de este país le dio la razón al “Caníbal” para que clave al pueblo trabajador de Puerto Rico de forma legal. La realidad es que no bastando con la incompetencia y la brutalidad de la Cámara y de los senadores Rossellistas es más que claro que en todo este sal pa fuera ficticio para dejar al pueblo en quiebra (irónicamente con el apoyo de alcaldes y legisladores “PNP”, wow) hay 7 personajes responsables de que el pueblo hoy se tenga que tragar un 13% se “sales tax”. Si, digo 13% porque mientras todos pelean por el tranque a todos se les ha olvidado hablar del 6.6% de arbitrios que aun esta vigente. Si a ese 6.6% le sumamos el 7% que nos acaban de espetar cortesía de los amiguitos del Tribunal Supremo tenemos un 13% de “sales tax” para ir haciendo embocadura, jeje. Digo 7 personajes porque adicional a los 6 verdugos del pueblo que se encuentran el Senado Popular esta el séptimo que es su líder, el “Milhouse”. Este último no ha dicho ni fu ni fa sobre el embeleco que sus nenes en combinación con el PPD se sacaron de la manga para castigar a un pueblo que ya no aguanta más. A esos 7 hay que sumarle a dos o tres tontejos que dicen llamarse alcaldes (su principal causa debe ser defender y buscar el bienestar de sus constituyentes, con sus acciones es lo menos que demuestran) como el “Hojalatero de Guaynabo City”, el plumífero de Yauco y el “Bipolar” de Vega Baja. Estos tipos tuvieron la oportunidad del siglo de reivindicarse con su partido y quedar como héroes ante el pueblo, pero sus caprichos y rencillas personales pudo más y en vez de sacar a la luz este traqueteo con el proyecto de “sales tax” y darle un impuesto justo al pueblo (aun cuando la consigna debió ser ni un impuesto mas después de todos los aumentos que nos ha dado este jodio gobierno) se hicieron de la vista larga y por consiguiente hoy el pueblo pagara más y más… Este país no se merece líderes tan estupidos e ineptos como ustedes. Con esta porquería, ¿el “Milhouse” y compañía pretenden presentarse como la esperanza del país?, wow. Gracias por nada 6 “auténticos” hijos de su madre, gracias por nada Fortuño. Ante la adversidad y la brutalidad de mis líderes se presentaron como unos sendos “hijos de puta”…

Supremo ordena envío de reforma contributiva a La Fortaleza

PRIMERA HORA > PANORAMA

Lunes, 3 de julio de 2006

PRENSA ASOCIADA

El Tribunal Supremo ordenó hoy, lunes, al presidente de la Cámara, José Aponte, que envié el proyecto original de reforma contributiva al Ejecutivo para su firma y ejecución.

El Supremo le concede a Aponte 24 horas para "cumplir con su deber ministerial" de firmar la medida que establece un impuesto al consumo de 7%.

La Cámara de Representantes reconsideró el proyecto el 27 de junio, para aclarar que la intención del cuerpo era aprobar un impuesto de 5.5%, 4% para el gobierno central y 1.5% para los municipios.

Según la decisión del tribunal, si Aponte no firma el proyecto, el presidente del Senado, Kenneth McClintock, podría cumplir con el trámite y enviar el proyecto a La Fortaleza.

Con la decisión del juez presidente del Supremo, Federico Hernández Denton, concurrieron por escrito los jueces asociados Anabelle Rodríguez y Jaime Fuster. Emitió una opinión disidente el juez asociado Efrain Rivera Pérez.

Acevedo Vilá dijo que firmará el presupuesto y la ley de reforma contributiva tan pronto le sean remitidos, "para acabar de una vez y por todas con la incertidumbre que rodea nuestra economía y el crédito de Puerto Rico".

La Cámara de Representantes aprobó el 21 de junio la reforma contributiva, e informó que el impuesto sobre las ventas sería de 5.5%. El domingo 25 de junio, el Senado refrendó la medida enviada por la Cámara sin enmiendas, pero se percató de que el impuesto que contenía el proyecto sumaba 7% y no 5.5%.

La Cámara reconsideró el proyecto el martes 27 de junio, y para hacerlo tuvo que dejar sin efecto su propio reglamento, que indica que una medida ya aprobada por el Senado puede ser reconsiderada en tres instancias: con el consentimiento de la Cámara Alta, un día después de haberla aprobado o en la próxima sesión.

El Senado no aceptó de vuelta la medida reconsiderada, y el presidente de ese cuerpo reafirmó que solamente recibiría el proyecto que la Cámara avaló originalmente.

Ante la disputa, Acevedo Vilá presentó el mandamus para obligar a Aponte a que le remitiera el proyecto original.